Jesús Armas es su nombre y lleva ya 78 años “pateando calle” como dicen. Solía conducir un autobús pero la edad y la inseguridad de la calle lo hicieron retirarse. Ahora sobrevive con un salario mínimo cuidando esta casa en remodelación, que será depósito de repuestos para la Ford. Sube a Los Teques los martes y jueves a visitar a su familia porque tiene varios nietos. La última se gradúa de bachillerato este año y el sr Jesús, que sólo tenia pan para comer ese fin de semana, me pregunta:¿Cuándo cuesta una cámara como la mía? Porque su nieta quiere una para su viaje de graduación.